Sonreír, mucho más que un accesorio corporal
Tuxtla.- Como si faltara un pretexto, cada 5 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Sonrisa, una práctica que requiere el trabajo de más de 100 músculos del cuerpo y también muchos beneficios no solo para la vida diaria, también para la salud.
A nivel de la psicología cognitiva, la risa siempre va unida al sentido del humor y produce una estrecha relación entre humor y creatividad; estudios ponen en evidencia que lo que nos produce risa se recuerda mejor. Además, la risa es un fenómeno fundamentalmente social, es decir que sonreímos y reímos con mucha mayor frecuencia cuando estamos con otras personas.
De hecho, las personas somos treinta veces más proclives a reírnos cuando estamos acompañadas que cuando estamos solas; la risa induce al afecto, ayuda a que tengan de nosotros una buena percepción social, es persuasiva y es un rasgo deseable que buscamos en la amistad y en la elección de pareja, según los expertos
En las últimas décadas, el sentido del humor y sus manifestaciones, como la risa, han llegado a verse no solo como un rasgo de personalidad muy deseable sino también como un componente clave de salud mental; de hecho, investigaciones experimentales ponen en evidencia que la risa es una moderadora del estrés, y permite el afrontamiento de factores estresantes vitales específicos.
Beneficios para la salud
Estas ventajas no solo son en lo social, sino que a nivel orgánico, desde tiempos de Aristóteles, médicos y filósofos han sugerido que la risa tiene importantes beneficios para la salud: mejora la circulación sanguínea, ayuda a la digestión, restablece la energía, contrarresta la depresión y favorece el funcionamiento de los órganos corporales.
En estos momentos son muchos los estudios que se están llevando con la risa como terapia, por ejemplo, hay investigaciones experimentales para estudiar los efectos de la risa sobre la inmunidad con resultados esperanzadores; también se están haciendo estudios para ver la relación entre la risa y la mejora del dolor y se realizan varios experimentos para establecer si la risa puede aumentar la tolerancia al dolor en condiciones controladas de laboratorio.
Igualmente, algunos especialistas estudiaron si aquellos que tenían sentido del humor y se reían eran menos proclives a enfermar y llegaron a la conclusión de que la risa tiene un efecto significativo como moderador de estrés y aquellos que se ríen son menos tendentes a enfermar.
Sonreír no tiene ninguna desventaja, si bien dicen que salen más arrugas si ríes mucho, esto sigue siendo una ‘leyenda urbana’; por el contrario, la risa provoca arrugas que distienden y genera secreción de sustancias que revitalizan la piel.
Algunas recomendaciones:
•Hay que cultivar el buen humor como quien cultiva el arte, la música o la literatura.
•Posología diaria: un minuto de risa cada 6 horas, durante el desayuno, la comida, merienda y cena; la risa de la mañana, frente al espejo, todo esto al principio resultará raro pero luego resultará placentero: es muy bueno reírse de uno mismo.
•Hay que cultivar la diversión.
•Es importante pensar en las cosas que más nos gustan y no permitir que los pensamientos negativos se apoderen de nosotros, ya que los pensamientos gobiernan las emociones.
•Debemos buscar siempre que nos sea posible la compañía de personas que tengan un buen sentido del humor, que nos hagan reír.
•Cultiva el hábito de la risa y del buen humor.
•Y, para terminar, recordad el dicho: ‘la sonrisa acaricia el alma y la risa abraza el corazón
¿Cómo cuidar la sonrisa dental?
1. Visita al dentista al menos una vez al año
2. No dejar de lado la rutina diaria de higiene dental
3. Hidratarse correctamente
4. Cepillarse los dientes después de cada comida
5. Al menos una vez al día es importante realizar una buena higiene bucal completa: con cepillado, pasta dental, higiene interdental y enjuague, según cada necesidad bucal
6. Eliminar el tabaco y no abusar del alcohol, ni de bebidas y alimentos azucarados
7. En caso de la ingesta de bebidas ácidas es recomendable esperar 10 minutos antes del cepillado, para dejar que la saliva neutralice los ácidos y evitar frotarlos contra el esmalte con el cepillado
8. Evita morder objetos duros, pueden provocar fisuras y fracturas en los dientes
9. Cambiar el cepillo dental cada 3 meses, o antes si los filamentos están desgastados o abiertos
10. Es fundamental no olvidar el cepillado nocturno
