Felipe Calderón renunció al PAN
México. El expresidente Felipe Calderón Hinojosa presentó esta tarde su renuncia como militante del Partido Acción Nacional (PAN), con el argumento de que esa fuerza política “ha dejado de ser el instrumento de participación ciudadana para la construcción de un México mejor, como pensaron sus fundadores”.
En una carta dirigida al presidente nacional, Marcelo Torres, explicó que su decisión se deriva también porque “el consorcio” que controla el PAN ha destruido la democracia interna, llegando al extremo de que durante los últimos años ninguna de las candidaturas relevantes del partido ha sido electa por los militantes y en cambio ha sido impuesta por designación de la membresía.
De acuerdo con Calderón Hinojosa, La nueva dirigencia panista será una fiel expresión de la corrupción, la mediocridad y la manipulación que la ciudadanía ha castigado severamente en las urnas, pues “la participación de gente honesta en las decisiones internas iría contra la complicidad de intereses que controla al PAN”.
El partido, aseguró en la misiva, ha cancelado el diálogo serio y respetuoso sobre problemas fundamentales del país, el cual ha sido cambiado por decisiones cupulares que responden a intereses personales y de grupo.
México, sostuvo Calderón Hinojosa, requiere urgentemente una opción de participación política a cuya creación ya vienen contribuyendo nuevas voces ciudadanas, especialmente de jóvenes, por lo que “permanecer en el PAN sólo implica una desviación y pérdida neta de tiempo, recursos y capacidad de organización que deben dedicarse a impulsar ese esfuerzo con todo vigor”.
Advirtió en el documento que la democracia interna está destruida de forma irreversible debido al uso indebido de los recursos del partido, así como el acceso privilegiado e inequitativo a la base de datos de la membresía en beneficio del grupo que controla al partido blanquiazul.
Calderón Hinojosa denunció que existe manipulación del padrón de militantes mediante exclusiones e inclusiones selectivas e ilegales, además de que, por quinto año consecutivo , se ha impedido la entrada de nuevos ciudadanos genuinos y desinteresados “y a cambio se permite el ingreso ilegal de miles de personas que son funcionales a la camarilla en el poder”.