Desatada la violencia en Amatán; desaparecen 50 “Mocris”
Tuxtla.- Integrantes del Movimiento Campesino Regional Independiente, Coordinadora Nacional Plan de Ayala, Movimiento Nacional (Mocri-CNPA-MN) señalaron a Manuel Caripo Mayorga, presidente municipal de Amatán, por la desaparición de 50 compañeros y las agresiones sufridas con arma de fuego de grueso calibre ayer jueves por la madrugada.
En una conferencia de prensa en esta ciudad capital, Erick Bautista y Leonel Rivero, vocero y abogado defensor de la organización, respectivamente, manifestaron su temor porque, hasta el momento, se desconoce el paradero de los integrantes del Movimiento por el Bien Común, la Paz y la Justicia en Amatán.
Comentaron también que Noé Jiménez Pablo, miembro del Mocri-CNPA-MN, y el poblador Héctor Cruz Hernández, resultaron con heridas de bala de metralleta R-15, y también fueron desaparecidos, “no sabemos cómo están, cuál es su estado de salud”.
Sin embargo, aseveraron que el grupo armado era comandado por Isidro Chávez y Javier Tovilla, quienes al parecer se los llevaron al ejido Limón, “estas personas están ligadas al actual alcalde y a su hermano, Wilber, quien ya fue presidente de este municipio, y quieren el poder a como dé lugar”.
Asimismo, detallaron que alrededor de 10 compañeras, entre éstas dos niñas, aún están retenidas en la Presidencia por parte de la gente de los hermanos Carpio Mayorga, así como se presume que dos defensores de derechos humanos también estén desaparecidos.
Explicaron que, de acuerdo con los reportes de compañeros del movimiento, la agrupación “de corte paramilitar” aún continúa con los disparos con armas de grueso calibre en la región, por lo que temen que la violencia se recrudezca de nueva cuenta.
Entre otros daños, refirieron que esas personas incendiaron cuatro vehículos del Movimiento, el cual permanece en la alcaldía para evitar que el actual munícipe de Morena, Manuel Carpio, tome posesión, “porque es considerado un espurio”.
Ante este panorama de violencia, los denunciantes solicitaron la presencia de las policías en esta zona, “que el gobierno haga su trabajo, que desarticule a los grupos paramilitares que dirigen los Carpio Mayorga, y a otros que están apoderados de la región”.