De “extrema gravedad”, la situación de la prensa en Nicaragua
Washington.- Ante la indiferencia de la comunidad internacional, el gobierno del presidente Daniel Ortega ha cometido graves faltas a la libertad de prensa desde que comenzó la actual crisis sociopolítica en Nicaragua, denunció la Sociedad interamericana de Prensa (SIP).
La situación de la prensa independiente en la nación centroamericana fue descrita como de extrema gravedad durante el foro sobre libertad de expresión y democracia en Nicaragua, organizado por la SIP y la organización Diálogo Interamericano (IAD, por sus siglas en inglés), que tiene lugar en Washington.
En el encuentro, que culminará hoy viernes, los participantes expusieron las continuas violaciones a la libertad de prensa, como represión y persecución contra periodistas, confiscación de equipos periodísticos, cierre de medios de comunicación, hasta medidas económicas contra medios de comunicación.
La presidenta de la SIP, María Elvira Domínguez, recordó que la censura comenzó desde el primer día de gobierno de Ortega en 2007 y que desde entonces se han denunciado las faltas a la libertad de prensa, pero sorprendentemente “el régimen ha pasado (desapercibido) por debajo del radar de la comunidad internacional”.
Lamentó que desde entonces la comunidad internacional no haya reaccionado, porque son “las primeras violaciones a la libertad de prensa las que comienzan a generar alarmas y marcan la pauta para que un régimen siga luego avasallando todas las demás libertades”.
“El caso de Nicaragua es de extrema gravedad”, dijo Domínguez, también directora del diario El País en Cali, Colombia, y enfatizó que el objetivo puntual de la SIP es seguir creando conciencia sobre las atrocidades que comete diario el régimen de Ortega contra la prensa, la expresión y los derechos civiles y políticos.
En el foro también participó el periodista nicaragüense Carlos Fernando Chamorro, director del semanario independiente Confidencial, quien se vio obligado a exiliarse en Costa Rica debido al acoso del que fue objeto en los últimos meses por parte del gobierno nicaragüense.
Chamorro aseveró que su país vive una “censura de facto” contra de la libertad de prensa y refirió como ejemplo de ello el asesinato del periodista Ángel Gahona, la represión y el acoso a periodistas, el cierre del canal 100% Noticias, Radio Darío y Confidencial, así como la asfixia económica a La Prensa y El Nuevo Diario.
El hijo de la expresidenta nicaragüense Violeta Barrios de Chamorro dijo que su exilio le ha resultado “doloroso”, pero que fue necesario para poder seguir informando, y reveló que en esa tarea cuenta con personal de Confidencial que permanece en Nicaragua y “reporta desde un lugar clandestino”.
Refirió que al menos 50 periodistas han salido del país porque temen por su vida, pero aseguró que “son muchos más los periodistas independientes que siguen informando desde dentro del país.
En el intercambio también participó Edison Laza, relator especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), quien resaltó el altísimo porcentaje de impunidad debido a “un Poder Judicial secuestrado por el Poder Político”.
La embajadora de Argentina ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Paula María Bertol, llamó a denunciar a los jueces que interactúan con el poder judicial; y el representante de Chile, Hernán Salinas, dijo que si fracasa el actual diálogo en Nicaragua debe ponerse en marcha la Carta Democrática.