Destacan beneficios de voto electrónico; sugieren blindajes
México.- Los mexicanos que viven en Estados Unidos podrán emitir el voto electrónico en la elección federal de 2021 y en los seis estados donde se elegirá gobernador, como parte del compromiso que tiene la Comisión de Vinculación con Residentes en el Extranjero del Instituto Nacional Electoral (INE).
El consejero electoral Enrique Andrade dijo que una vez que el INE implemente el voto electrónico al menos un millón de mexicanos radicados en Estados Unidos podrán participar en dichos comicios, en los que, además, se elegirá por primera vez dos diputados migrantes, uno de la Ciudad de México y otro de Jalisco.
En el marco del IX Foro de la Democracia Latinoamericana, en la sesión referente al voto electrónico, resaltó que éste es una prioridad para el INE, por lo tanto este foro permite conocer los comentarios y experiencias a nivel internacional para determinar si el instituto va por buen camino para generar confianza en la sociedad con miras a las próximas elecciones.
A su vez Jordi Barrat, doctor en Derecho por la Universidad de León, España, expuso la existencia de tres aspectos necesarios en el uso de la urna electrónica.
Ellos son la utilización del voto electrónico y el uso del voto por Internet por parte de los partidos políticos para la toma de decisiones a su vida interna, y la definición de voto electrónico respecto de la fase del mecanismo en la emisión con identificación, biometría, y transmisión de resultados.
Lo anterior se suma a la auditoría, certificación y transparencia del voto electrónico, que implica la certificación mediante empresas independientes y de prestigio internacional.
En tanto Peter Wolf, especialista en ingeniería de informática de la Universidad Tecnológica de Graz, Austria, señaló que en el voto electrónico no hay tecnología ciento por ciento segura.
Ante ello, subrayó, es necesario blindar con una fuerte inversión económica y diferenciar entre máquinas para votar en casilla y voto en línea, las primeras son más fáciles de implementar, mientras que las segundas permiten ejercer el derecho al voto sin importar la ubicación de los votantes.
Así, coincidieron en la importancia de garantizar la seguridad del equipo para la protección del voto, eliminar el riesgo de la compra de votos por presión, precisar la manera en la que se puede identificar el voto y qué tipo de garantías se tienen para poder preservarlo, lo que implica que los hackers no puedan alterar los resultados y garantizar a los ciudadanos la confianza en los comicios.
Además subrayaron la importancia de entender la criptografía, que es la seguridad de datos, los algoritmos y las tecnologías de información; la gestión de riesgos del voto electrónico radica en la necesidad de garantizar elecciones libres y democráticas, apuntó.
Las tecnologías son vulnerables en materia de seguridad informática, por lo que varias democracias en Europa han decidido quedarse o regresar a los enfoques tradicionales del voto en papel ante la vulnerabilidad del voto electrónico o en línea, ante las fallas que se generan durante el proceso y diseño de los sistemas informáticos.