Restauranteros en Chiapas esperan resultados discretos durante temporada vacacional
Tuxtla.- Arturo Marí, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) aseguró que una de las expectativas para estas vacaciones correspondientes a la Semana Santa es alcanzar un aumento en las ventas del 5 por ciento.
Comparado con el mismo periodo del año pasado, calculó que no creen superar ese porcentaje, “pues para esto nos basamos en las ventas del pasado 14 de febrero, que tampoco superaron el 5% del año anterior, lo que nos da ese balance”.
Detalló que hasta el momento la afluencia turística en la capital tuxtleca no ha sido tan alta, pero en el caso de San Cristóbal de Las Casas hay un incremento superior a los 10 puntos porcentuales, mientras que en la Costa al parecer también habrá un repunte importante.
Aceptó que las ventas se cayeron de forma drástica, “y este aumento del 5% obedece a una inflación, por eso esperamos por lo menos salir dentro de los parámetros de 2018, y por eso basamos un posible aumento moderado, porque sí se vive una depresión en la economía”.
Para “salvar la temporada”, aclaró que han lanzado una serie de promociones y estrategias, como el convenio que firmaron con el Sindicato del Colegio de Bachilleres de Chiapas (Cobach), el cual beneficia a todos los trabajadores para descuentos y promociones en los negocios afiliados a la Canirac.
Incluso reveló que pueden efectuar sus reuniones en los establecimientos y que los cobros se efectúen vía nómina, en parcialidades, “y en el caso del público en general, hay compañeros que han hecho promociones, como el ‘2x1’ en las cuentas, o algún obsequio o algo que estimule la venta, un postre…”
Sobre algunos posibles “ajustes” de los precios a las cartas, resaltó que en estos momentos ya no se registran los mismos, “los que se dieron, fueron a principios de año, entre enero y febrero y descartamos que se den más”.
En cuanto a Tuxtla, Marí lamentó que aún no logre “despegar” como se anhela, aunque declaró que hay un optimismo en el momento en el que el gobierno empiece a ejercer el presupuesto que recibe de la Federación y que empiece a contratar obra pública y los servicios locales.
