El 78% de parteras chiapanecas han recibido capacitación
Tuxtla.- De las 3 mil 270 parteras tradicionales censadas en las 10 jurisdicciones sanitarias de Chiapas, el 78 por ciento ha recibido una capacitación, informó René Portillo Dávila, responsable estatal del Componente de Desarrollo Comunitario de la Secretaría de Salud.
Destacó que es complicado llegar al 100% debido a que la dispersión geográfica impide que ellas acudan a las reuniones o incluso el mismo personal de Salud, por lo que dejó en claro que quien ya recibió los conocimientos necesarios es porque cursó los 10 u 11 temas en el año.
Es decir, explicó que es probable que alguien haya llegado solo una o dos veces a los cursos y por eso no las identifiquen como capacitadas, “pero sí llegan, y por eso tenemos 2 mil 545 parteras capacitadas, la mayoría se concentra en la Jurisdicción Sanitaria II, en San Cristóbal de Las Casas, con el 29%, es decir 953 en total”.
Asimismo, destacó que le sigue Ocosingo, en la región Selva, con el mayor número con 20 puntos porcentuales, es decir que entre esas dos zonas se abarca casi la mitad de parteras en el estado, “repito, las que tenemos son las censadas, existe un listado nominal, pero pues sabemos que hay parteras familiares”.
Estas últimas, agregó, son aquéllas que se dedican a atender a mujeres que son sus parientes, como hermanas, primas, sobrinas, entre otras, “no atienden a la demás población y por eso no están captadas, pero no se puede captar porque ellas no dicen que son parteras”.
Si alguna partera desea capacitarse con el sector Salud, explicó que se pueden acercar y de esa forma brindarle más conocimientos, “parte de nuestras estrategias, es que trabajamos todos los días con ellas, y son las jurisdicciones sanitarias las instancias que las capacitan”.
En sitios como Ocosingo, en regiones alejadas de la cabecera, los adiestramientos son más esporádicos, es decir cada dos o tres meses, afirmó el entrevistado, quien puntualizó que siempre están pendientes de que incluso a ese sector se les entregue una credencial que avale su labor como personal voluntario.
