Cero tolerancia para docentes paristas de la CNTE
Tuxtla.- Cansados de que sus hijas e hijos no reciban clases, sin ninguna justificación válida, e indignados porque las y los maestros que conforman la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) continúan aprovechándose de la educación para su propio beneficio, afectando a la niñez y juventud chiapaneca, madres y padres de familia decidieron enfrentarlos para no permitir el cierre de las escuelas.
Durante esta semana en que dio inicio el ciclo escolar 2019-2020, en varios municipios de la entidad se dieron diversas problemáticas alrededor de este hecho, quedando demostrado que la sociedad chiapaneca está a favor de la buena educación y no tolerarán que sus hijas e hijos dejen de asistir a las aulas, sólo porque los intereses de la CNTE no están siendo solapados.
En la Escuela Secundaria General Centenario de la Migración Japonesa, del municipio de Acacoyagua, un total de 16 maestras y maestros pertenecientes al sindicato no se presentaron a dar clases a los jóvenes. Ante la negativa de entregar las llaves de la dirección escolar, las madres y padres de familia procedieron a abrir con la ayuda de un cerrajero para no permitir esta arbitrariedad, levantando un acta de los hechos ante la autoridad municipal.
Mientras que el director de este plantel educativo, Óscar Agustín Espinosa, informó a las autoridades educativas de estas ausencias, para que se aplique a las y los docentes el respectivo descuento, y en caso de seguir faltando, les levantarían un acta por abandono de trabajo.
Situación similar se vivió en el Centro de Atención Múltiple “Lic. Benito Juárez García”, ubicado en el municipio de Pichucalco, en donde el Comité de Padres de Familia decidió abrir la escuela, luego de que un minúsculo grupo de la CNTE, encabezado por los profesores de la Zona Escolar 08 de educación especial, cerraron con candados y cadenas los accesos, como forma de presión, ya que este centro educativo no aceptó a dos maestros comisionados por el líder sindical Pedro Gómez Bámaca.
Cabe señalar que ante la cerrazón de quienes dicen defender la educación pública, negando el acceso a niñas y niños a su escuela, el comité decidió denunciar ante el Ministerio Público y personal de la Dirección de Servicios Periciales estos hechos lamentables, para dar fe de los daños provocados y el deslinde de responsabilidades, y fueron los mismos padres de familia que resguardaron el lugar para evitar un mayor conflicto.