Chiapaneca lanza sencillo recordando a víctimas de feminicidio
Tuxtla.- Los feminicidios son un tema recurrente en la entidad: los escuchamos en las noticias, los vemos en redes sociales, los platicamos a la hora de la comida, se han vuelto algo delicado y controversial, por eso, una estudiante de música chiapaneca quiso darle un giro al tema a través del arte.
Es Kristel Lilibeth Ocaña, estudiante de música de la Unicach, su idea surge de esta constante información que tenemos acerca de los feminicidios, sobre todo en el estado, pero que ella consideraba muy negativa.
“Siempre vemos las escenas del crimen, es una cuestión muy dolorosa para quienes lo viven, ante todo este exceso de información negativa quise proponer desde la perspectiva del arte con una canción contrastante; hablar de esto es muy duro, por eso decidí ponerle música alegre, que fuera agridulce, para convocar a la reflexión”.
Es así como en 20 minutos, escribió ‘Las flores que arrancas’, lo difícil fue agregarle música, pero todo es creación suya: la letra, los arreglos musicales, para lo que la ayudaron algunos amigos instrumentistas para grabarla, el tema fue grabado aquí y mezclado en Monterrey, todo por profesionales.
“Siento que fue bastante rápido, la escribí en menos de media hora pero fue más el trabajo del arreglo, de que sonara a lo que yo quería, grabé tres versiones y en dos meses estaba terminada”, señaló.
Una vez pulida y ya con su video musical, quiso presentarla ante los familiares de estas víctimas de feminicidio, ya que en el video salen fotos de chicas que pasaron por esa experiencia y sus familias le facilitaron la información.
Después de esta emotiva reunión, la subió a redes sociales y próximamente estará disponible en Spotify, este tema forma parte de un EP de cinco temas que sacará uno por uno, se titula ‘Verde, blanco y muy rojo’, pues tocará otras problemáticas actuales, considera que el arte ha perdido esa asociación con la sociedad y quiere recuperarla.
“Reunirme con las familias de estas chicas fue algo muy fuerte, todos acabamos llorando aún sin tener una relación tan directa, escuchar cómo narra un familiar lo qué pasó con su hija, hermana, madre, hermana, y volverlo a vivir con esa narración… se les admira por la lucha que mantienen porque se haga justicia, algo que muchas veces no sucede por situaciones políticas o económicas”.
En general, Kristel considera que fue una experiencia fuerte, pero era lo que tenía que hacer, alguien tenía que alzar la voz e imprimirle arte a esta situación, por la memoria de ellas… ya que “esas flores que tú arrancas tenían vida, tenían sueños, había amor en sus familias, tenían brillo en su cabello”.
