México debe avanzar hacia un sistema de salud universal
México.- Para que México logre tener una verdadera cobertura de salud universal necesita: capacidad para prevención, detección oportuna y diagnóstico preciso; capacidad para atención con seguimiento continuo, infraestructura suficiente para la atención de necesidades, recursos humanos competentes y abasto oportuno de medicamentos; pruebas de laboratorio y vacunas, dijo el epidemiólogo mexicano especialista en políticas de salud, Roberto Tapia Conyer; durante el simposio “La salud en la Asamblea General de la ONU”, realizado por la Academia Nacional de Medicina de México.
El director general de la Fundación Carlos Slim recordó que uno de los grandes retos que hoy tiene el Sistema de Salud, con el especial perfil de morbilidad y mortalidad del país, es que el usuario llega para quedarse, y necesita tener esa continuidad de vida. Aunado a esto, la infraestructura de atención no es suficiente, y aunque el primer nivel ha tenido una expansión en unidades, no lo ha hecho en recursos competentes.
“Cuando revisamos estadísticas nos damos cuenta de que los médicos, enfermeras y laboratoristas de primer contacto se quedan sólo con el conocimiento que adquirieron en la universidad, sólo el 30% ha tenido un curso de actualización, parte de este problema se puede solucionar aprovechando las herramientas digitales y promover la capacitación en línea”, dijo el también integrante de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).
En el simposio, coordinado por Juan Ramón de la Fuente Ramírez, embajador de México ante las Naciones Unidas y ex presidente de la AMC; señaló que es muy importante fortalecer la inversión pública en salud, pero que ese financiamiento debe estar basado en resultados y cuidar cómo se ejerce.
En septiembre de 2019, líderes mundiales aprobaron la Declaración Política “Cobertura universal de salud: avanzar juntos para construir un mundo más saludable”, que defiende la salud como un derecho humano y pide el compromiso de una mayor inversión en los sistemas de salud para reforzar la atención primaria, además de reconocer la urgencia de garantizar el acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva.
Sobre esta declaración, dijo, me parece trascendente el rescatar la atención primaria como fundamento del sistema de salud sostenible, y para ello se necesita generar un sistema robusto y resiliente con una estructura, robusta, resiliente y costo-efectiva, sí, desde el primer nivel de atención, porque es donde está la base del Sistema de Salud.
“En el país ha habido mucha intención, el interés está, pero no se ha logrado aterrizar. Pero quizá ahora sea una gran oportunidad, ya no es un planteamiento sólo de la Organización Mundial de la Salud, sino también de Naciones Unidas y eso le da una gran relevancia, es decir, ya nos es un planteamiento de requerimiento de gusto o de planteamiento local, es un planteamiento global”.
De acuerdo con Tapia Conyer, la atención primaria es la piedra angular para poder llegar a una cobertura universal; esto de la cobertura universal habría que verlo con toda la responsabilidad de vida, porque es tener claro la manera en que vamos a llegar con el ciudadano, no sólo con el que ya tiene la necesidad de resolver un tema de salud, sino desde la perspectiva preventiva y anticipada.
Señaló que México ha pasado por varias reformas políticas “pero no hemos tenido una reforma en el tema de funcionalidad el Sistema de Salud en su conjunto”.
Números sobre salud de la ONU
De acuerdo con De la Fuente Ramírez, “la declaratoria busca alinearse con la Agenda 2030 ya que la mitad de la población mundial carece de servicios esenciales de salud y aún con los esfuerzos emprendidos se calcula que un tercio seguirá sin acceso en el año 2030, a pesar del aumento en la esperanza de vida y la reducción de la mortalidad infantil. Para prevenir 97 millones de muertes prematuras en 2030, la inversión en salud debe aumentar 3.9 trillones de dólares (equivale al 1% del PIB en los países en desarrollo)”.
Recordó existe un déficit de 18 millones de trabajadores de la salud en el mundo y que los principales retos en salud mundial tienen que ver con: enfermedades no transmisibles, trastornos mentales y el alto costo de los servicios médicos. El gasto mundial en salud es de 7.5 trillones de dólares, 10% del PIB mundial. Por ello en la declaratoria se reconoce que el combate a la corrupción es una prioridad para el sector salud y una barrera para alcanzar la cobertura universal.