La clave está en casa

En la última década, Pumas ha sufrido para encontrar la regularidad en el banquillo en varias ocasiones. Han sido los estrategas surgidos de la cantera auriazul, aquellos de casa, los que mayor regularidad y mejores resultados han tenido.

Tras 10 años de buscar los cambios adecuados en el banquillo, los estrategas de extracto auriazul son los que más glorias han cosechado, basta mencionar que en el último título de los del Pedregal, un estratega que conoce las entrañas del club los llevó a levantar el trofeo de campeones.

Fue en el Clausura 2011 cuando Pumas alcanzó la final y logró ser campeón bajo la tutela de Guillermo Vázquez Jr., quien encabezó el proyecto auriazul y dio a los felinos una nueva alegría. Incluso fue el mismo Memo quien puso a los universitarios en el último partido por el título que disputaron cuando llegaron a la final del Apertura 2015, la cual perdieron ante Santos.

A través de los años, se demostró que los procesos más largos fueron de los elementos de casa. Al inicio de la década, Memo Vázquez estuvo en la institución dos años. La excepción fue con Joaquín del Olmo, quien no pudo completar un torneo y entró Juan Antonio Torres Servín como interino.

Después lo suplió Mario Carrillo, pero tampoco pudo quedarse al no tener buenos resultados y entró Torres Servín al interinato. Fue el mismo Carrillo el primer técnico que no es de casa en tomar al club en la década.

Finalmente se decantaron por José Luis Trejo, quien dejó sumidos a los Pumas en malos resultados y Trejo no era de casa. Memo Vázquez regresó y los llevó a la final del Apertura 2015. De 2014 a 2016 estuvo el mexicano como líder del banquillo.

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