La Columna: La culpa no es del…

Primero que el nombre, traer de vuelta a Jaguares fue más relevante, por ejemplo, que un proyecto que estaba por cumplir una década, que ya había conseguido un título y un ascenso deportivo y que apuntaba a consolidarse con muchas liguillas en la capital chiapaneca; aún con eso, la gente se dijo que le parecía más revivir a los Jaguares.

Está bien, pero el tema de revivir un proyecto que gastó 15 años en la Liga MX, no era sencillo porque iban a colocarlo en la Liga Premier, el nombre es el mismo, pero en esa categoría no significa mucho y para muestra, el primero torneo con el nombre y los colores.

Después, la marca que los viste, revivir a unos empresarios que, a pesar de que en algún momento tuvieron más del 50 por cierto de equipos de la Liga MX bajo su patrocinio, que les sobraba calidad en las prendas, pero que igual desaparecieron del mapa sin dejar rastro. No hay que olvidar que hasta una tienda grande había en Tuxtla, que permaneció a pesar que con Azteca, Jaguares vistió Joma, después con los Chargoy, Pirma y Charly. Pero sí, Atlética desapareció del mapa y a Jaguares se le ocurrió la idea de revivir, con esa nostalgia que llenaba a esos aficionados. Ya cada uno hará el balance de esa marca, desde la calidad hasta el precio, aunque en el precio al público, el club tuvo mucho que ver.

No hubo buenos resultados con esos rasgos de nostalgia, impregnados en este nuevo torneo, con este equipo resucitado de la nada, con unos colores que, son de mucha utilidad, pero en la Liga Premier no juegan.

Ahora, tras un horrorosa partido debut en el torneo, la dirigencia cesó a Alfredo Durán (se tardó, era desde la eliminación del torneo anterior), y para suplirlo, desempolvaron a José Luis Trejo, de quien su última experiencia en el banquillo data del 2021 en Nicaragua, con el Real Estelí. En México no dirige desde hace mucho tiempo y en 2019 pudo dirigir en España, pero su carnet no estaba acreditado en dicho país.

Una aventura, sin duda, una apuesta riesgosa, por supuesto, porque parece que de nuevo, apelar a la nostalgia hace tomar decisiones que no traen certeza, falta ver que Trejo pueda desenvolverse de buena forma, porque la Liga Premier pocas veces ha visto a entrenadores de ese tipo en los banquillos y los que lo han conseguido, no han tenido tanto éxito.