La Columna: Un sitio sin control
- Annete Lewis
- 26 ene 2024
- 2 Min. de lectura
En el Instituto Municipal del Deporte han presumido de haber conseguido cumplir con un procedimiento burocrático como es el POA, que a ciencia cierta no es más que un parámetro burocrático, sin objetivos tangibles y sin analizar si los dirigentes tienen proyectos a desarrollar; es decir, si van a encontrar el escenario en el que puedan conseguir objetivos tangibles en la sociedad y no en los escritorios.
Y digo que lo presumen, porque vaya que si en varias ocasiones, tanto el director del Indetux, como la Secretaria General del Ayuntamiento, han manifestado que van a “dejar muy en alto” el POA, pero de otras cosas, hacen caso omiso y muchas de sus omisiones, comienzan a quedar en evidencia.
Hace unos días, trascendió que en al interior del Parque del Oriente, uno de los estandartes de promoción de la actividad física de los dirigentes antes mencionados, se suscitó un asalto a mano armada, en el que un “usuario” vio o supo que en ese parque no había un solo elemento de seguridad, que no existe video vigilancia y mucho menos interés en proteger a los usuarios, razones que propiciaron que alguien, con un arma de fuego, sometiera a dos usuarios jóvenes y los despojara de sus pertenencias.
Que sucedan este tipo de situaciones ha despertado interés por saber cómo funciona el Parque del Oriente, como para no contar con seguridad; es quizá el segundo parque en importancia en la capital del estado, pero va perdiendo adeptos cada vez más, ya que si no es negocio que pueda dejar algo a los dirigentes en turno, no hay forma de entregar seguridad a un espacio como es ese pulmón tuxtleco.
Entre los dirigentes o integrantes del Ayuntamiento, se pueden contar con quienes practican la actividad pedestre, presumen sus carreras y logros, pero entrenan entre la seguridad que les proporciona un parque como caña Hueca, mientras el resto, por ahí va en Fundamat también, viven siendo el nido de actividades que van en contra de esos espacios, delincuencia y quien sabe qué más actividades no suceden en ese espacio.
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