Roberto Rodríguez, un artista adelantado a su tiempo

El día de hoy nos acompaña en este espacio Roberto Rodríguez, artista visual, chiapaneco, más chiapaneco que el pozol, es originario de un pueblo que se llama Acala, a una hora de Tuxtla, donde te encuentras como en el siglo XVI, cuando llegas y ves la arquitectura, eso lo inspira para hacer el trabajo como creador, algunas pinturas que tienen el tema de la cotidianidad, de ahí se basa, mucho de sus raíces y posteriormente también hace cosas muy contemporáneas, a través de las fotografías, viaja muy poco en todo el año, prefiere estar creando, sus viajes son a través de la forma virtual, puede ver fotografías de Europa y se imagina cómo es la arquitectura, pero le gusta mucho la cuestión de la arquitectura en México, lo colonial, los colores.

“Un referente como arquitecto que yo soy es Luis Barragán, utiliza puros colores muy mexicanos, el rosa mexicano, los utilizo en los cuadros, ahorita traje una pintura de una serie que se llama El café, los colores del café, estuvo expuesta en diferentes lugares y ya termina esta exposición porque vamos a mostrar nuevas obras, ya está vendida y con esta concluimos esta serie, voy a hacer una serie nueva de café, pero con diferentes contenidos para darle al público y que vaya conociendo sobre mi trabajo”, expresó.

Si bien no pinta una obra diaria, quizá sí hace 100 cuadros en el año, incluyendo dibujos, bocetos hace miles, puede hacer 10 bocetos en el día, si estuviera en un café, está con una servilleta, acostumbra hacer bocetos para sus próximos trabajos, tanto murales como pinturas, dibujos y también elabora bocetos para los concursos, en el año puede entrar a 10 concursos de manera individual o colectiva, en los murales trata de entrar de forma colectiva porque son grandes formatos, le llevaría mucho tiempo trabajar solo y le gusta esta técnica limón, que le llaman los artistas donde intervienen varios.

“Por ejemplo, si hacemos un cuadro con dos artistas, anteriormente ya hicimos un trabajo creativo con Noé Amor y Mario Tassías, que se logró en crear una pieza única, que incluso está a la venta todavía, se llama el Carnaval Zoque, es una pieza muy interesante, quizá ahora con el tema de la chiapanequidad podamos retomar todavía estos elementos tan importantes… yo siento que debería de haber nacido, debo de nacer en el 2030, anteriormente dije que me hubiese gustado nacer en el renacimiento, porque era la época donde se regresaba a lo clásico, a las pinturas, los claroscuros, con David, sí me hubiera gustado esa época, muy del romanticismo y todo, pero ahora me gustaría nacer en el 2030 por las nuevas vanguardias que vienen, no sabemos qué nos espera, qué nos depara con eso del Apocalipsis, sería como un nuevo estilo, el estilo apocalíptico le podríamos llamar”.

El artista considera que la sociedad cambia, acabamos de cambiar de presidente, vienen nuevos desafíos para la cultura, tanto a nivel nacional como a nivel internacional, hay que estar al día con las nuevas actualizaciones, tanto de técnicas como de nuevos estilos que se están manejando, y sobre todo tienen que proponer, los artistas, de esta nueva transformación que se está construyendo, las expectativas son muchas, porque no saben qué les depara el 2025, que ya está muy cerca, para ver qué nuevas tendencias, tanto en arquitectura como por ejemplo, un muro 3D ahora es muy fácil de conseguir, anteriormente era como un sueño, nada más verlo en las revistas de arquitectura, y ahora ya se puede ver de manera física.

“Es lo mismo en la pintura, quizá hablamos de nuevos, el nuevo arte conceptual que se maneja, como las obras invisibles que nadie las ve, pero ahí están, nosotros seguimos todavía con lo visible, con lo que se puede ver en este fondo, que es un pájaro, que es un elemento polinizador dentro del café, y todavía seguimos trabajando técnicas tradicionales, todavía no hemos llegado mucho a profundizar en lo digital”, añadió.

Para transmitir el arte, dijo que la manera es a través de las escuelas, a través de la enseñanza aprendizaje con los alumnos, que tienen una visión mucho más amplia por el internet, por la tecnología, hay nuevos programas de diseño, ahora se está trabajando mucho en la cuestión digital, el transmitir el conocimiento de uno a otro, tanto artistas emergentes que han estado trabajando actualmente, e ir viendo los referentes nuevos en el arte y la pintura, dijo que la inteligencia artificial es un tema que está en boga ahorita, incluso él lo está practicando, al inicio de la pandemia ya trabajaba con ello, y es un tema muy interesante porque casi todo lo que se está haciendo en arte de vanguardia, desde los 60, es como este nuevo elemento que surge.

“Tú puedes a través de esta pintura darle movimiento, a través de las aplicaciones, yo he manejado la inteligencia artificial al crear estos collages digitales, utilizo mucho la inteligencia artificial porque tiene los programas que te facilitan, por ejemplo, al alcance puedes tener 10 o 30 técnicas que las mezclas y puedes lograr nuevos resultados, que a mano no puedes lograr, pero con una buena impresora y con un buen programa puedes lograr muchas cosas, esperemos que ya se pueda hacer también escultura con inteligencia artificial, sería algo muy novedoso y quizá ahorita puede ser un poco caro, ya ves que ahora está Alexa para la música, igual para la pintura pudieran tener proyectores o no sé qué tipos, que me ocurre que la gente pudiera comprar un Alexa pero que fuera de arte, de cultura, no nada más cuestiones comerciales”.

En un futuro, le gustaría visualizar un Chiapas con un museo de arte contemporáneo, el cual ya tiene un tiempo que se está gestionando, no hay, quizá no hay gente que haga arte contemporáneo, acaba de suceder un caso donde se declaró desierto un concurso donde no hubo escultores, y si no hay creadores o no hay una propuesta artística, jamás se va a tener un museo de arte contemporáneo, pero se visualiza a largo plazo, a 20 años ya tener uno de los museos, viendo espectáculos artísticos, porque no nada más en el teatro hay performance, también los artistas visuales hacen performance, pero no se ha dado esa oportunidad con la gente porque quizá no lo ve como arte.

“El salir a la calle y hacer una instalación, por ejemplo en el espacio público, ahora han creado nuevos parques como el Bicentenario, quizá me imagino un parque lleno de esculturas, tanto que sean elaborados por escultores y también esculturas vivientes, como el performance que se hace en Europa, tú vas a la calle y ves los artistas callejeros que están trabajando pero también están haciendo arte… si no fuera artista, elegiría una vida como profesor de primaria, que esté yo alejado del arte, de las cámaras, de los eventos, de las exposiciones, tener un horario de 8 a 2 de la tarde tranquilamente, irme a mi casa a descansar, eso sería como una vida ideal”, admitió.

Su mamá acaba de hacer dos años que falleció, en vida le hizo un cuadro que se llama Los Cerezos, es una obra que está hecha en tela, esa sí no la vende, es la única que quizá se quedaría, si tiene 100 cuadros qué vender y si tuviera mucha necesidad, es la única que no vendería y tampoco haría yo una réplica de ella, sería la pieza única que le quedaría hasta ver el último; por otro lado, un sueño pendiente es este museo de arte contemporáneo, verlo realmente funcionando y que sus compañeros pudieran exponer, más que exponer es tener sus piezas ahí, porque hay muchos que tienen cosas que no han mostrado, quizá porque no quieren que vean, por ejemplo, hacen una escultura y tal vez les dé pena que puedan reírse de ella, o quizá la vean muy costosa, sí es un sueño y si le permiten diseñarlo sería genial.

“Actualmente doy clases en Corazón Borraz, se llama Casa de las Artes y las Culturas, ahí doy clases los días lunes, miércoles y viernes de 5 a 6, eso es de manera institucional, y de manera particular doy clases también de dibujo y escultura en el Centro Cultural El Árbol, está ubicado en Avenida Aire en Fraccionamiento Las Brisas, ahí doy los días martes y jueves de 4 a 6, para las personas que nos van a ver y puedan acudir, y mi número es Whatsapp 961-159-6647, para edades desde 3 años hasta que el cuerpo aguante, hasta 99 años”, dijo.

Como maestro de enseñanza de las artes, ve a las nuevas generaciones, a una niña de 3 años que ya pinta en un caballete, cuando antes tenías 12 años y apenas podías tener acceso a los materiales, ahora las tablets también ayudan mucho, las tabletas electrónicas, pero sobre todo que hay mucho más información al alcance de las personas, materiales como los colores, las acuarelas, todo ese tipo que antes no se tenía, apenas llegó a tener unos colores

Prismacolor, de 12 colores, ahora le llevó un alumno la semana pasada un estuche de 160 colores y dice, ¿qué color va a utilizar? Y le dijo, vas a usar 10 tonos de rosa o 10 tonos de verde, lo que antes para él era fabuloso.

“Cuando me decía mi maestro, tú ve un árbol y ve cuántos colores tiene, y se quedaba ahí pensando, además de amarillo tiene verde, tiene rojo, tiene miles de colores, son millones de colores, que le llamamos píxel, en la cuestión digital son píxeles, pero cómo lo percibe el cerebro, es diferente, dicen que los artistas utilizan su lado izquierdo y lado derecho, el lado izquierdo es el creativo y el derecho es el del conocimiento y pienso que sí, es desarrollar toda esta habilidad que tiene y la destreza con las manos de los alumnos que entran mucho al internet y tienen acceso de, por ejemplo, ir a un museo virtual y ver las obras, a diferencia de nosotros que eran con libros, que tardabas más en ver un libro, leer toda la historia de un artista, por ejemplo Picasso, y ahora tienen la facilidad en Netflix de poder ver los documentales y ahí ver la obra de todos los que tú quieras”, añadió.

Si dejara en una cápsula del tiempo un mensaje para los creadoras del futuro, no diría que está dejando una impronta, porque hay mucho más artistas que van a trascender, en su obra van a dejar un legado artístico, dejando el conocimiento a través de los alumnos que quizá vean este vídeo después de 10 años, como un vídeo retro, de Gastón entrevistando a Roberto, recuerda mucho a Jacobo Zabludovsky cuando entrevista a Dalí, piensa que es el único reportero que lo logró entrevistar aquí en México, la vuelve a ver y siempre encuentra algo diferente, siente que Dalí quiso dejar ese legado, pero él sí dejó una impronta a cuestión del surrealismo.

“Él pensó que la gente lo iba a ver dentro de, no sé cuánto tiene ese vídeo que le hicieron, y lo ves en blanco y negro, ahora ya todo lo vemos a color, quizá dentro de 20 años ni siquiera va a ser a color, no sé qué tanto va a ser en 3D, no sé cómo puede ser, pero si dejamos este cuadro, que lo van a ver dentro de 20 años, quizá los colores ya van a cambiar, va a ser diferente la tonalidad, pero sí, les dejamos un saludo”, finalizó.